Las habilidades financieras del CFO del mañana

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Habilidades financieras: el papel del CFO en el futuro
14:08
El poder de tomar mejores decisiones de negocio
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Nuevas ideas y consejos de 2.650 responsables de finanzas de toda Europa

El perfil de los CFOs del mundo está cambiando a pasos agigantados.

Y no solo por la tecnología, ojo.

Sí, es cierto que la automatización está transformando las tareas financieras, pero el cambio real va mucho más allá.

Cambio… ¿hasta dónde? ¿Qué se espera del CFO del futuro?

Estrategia, comunicación y capacidad de liderar en un entorno cada vez más complejo. Las habilidades financieras técnicas ya no son suficientes por sí solas.

La figura del CFO está evolucionando hacia un rol mucho más transversal, si lo comparamos con los líderes financieros tradicionales. Ahora está más conectado con otras áreas del negocio. Más orientado a las personas; más importante.

Y eso exige un nuevo tipo de habilidades financieras que hasta ahora no eran tan capitales: es preciso contar con un equilibrio entre conocimientos técnicos y soft skills como el liderazgo, la empatía, la adaptabilidad o la colaboración interdepartamental.

¿Nos sumergimos en ese equilibrio para verlo más a fondo?

Importante: a lo largo del artículo hablaremos de algunas conclusiones del estudio que elaboramos recientemente. En él, más de 3.200 responsables financieros de empresas europeas comparten cómo está evolucionando su rol y qué habilidades marcarán la diferencia a lo largo de los próximos años.

Del guardián del dato al impulsor del cambio

Tradicionalmente, el CFO tenía que gestionar números, presupuestos y balances.

Es como si sus responsabilidades se ciñeran a las cifras y ya está.

¿Y hoy?

Nada que ver. El CFO ya no solo es el líder financiero, sino también el estratégico. Es la persona con más responsabilidad a la hora de tomar decisiones importantes en momentos de incertidumbre.

La estadística al habla: según el estudio, el 37 % de los CFOs afirma que hoy se les pide mucho más en términos de estrategia empresarial que hace cinco años.

¿Qué ha motivado este cambio?

Va, que seguro que lo sabes.

Empieza por «digi».

Digi… ¿talización?

Digitalización, tal cual. Tecnología pura.

La digitalización financiera y la automatización han absorbido una buena parte de las tareas operativas, repetitivas y manuales que antes dominaban la agenda de todo responsable financiero. 

Y con eso, el CFO ha ganado algo valiosísimo: tiempo

Tiempo que puede invertir en lo realmente importante: centrarse en la estrategia para definir hacia dónde va la empresa, a fin de que alcance sus objetivos en términos de rentabilidad.

Pero el cambio no viene motivado solo por la tecnología… qué va. 

También está propiciado por la creciente necesidad de adoptar el trabajo colaborativo. Si el equipo de finanzas colabora con el resto, podrá hacer mejor su trabajo. Y el resto de departamentos, también.

Parece que ha calado la idea de que trabajar mano a mano con recursos humanos, ventas o TI aumenta las probabilidades del éxito de la empresa. 

Porque las mejores decisiones ya no se toman en silos organizacionales… se toman en conjunto 🤝

Menos Excel, más visión estratégica: el impacto de la digitalización en las habilidades financieras del CFO

Volvamos a esa situación de hace unos años, donde gran parte de la agenda del CFO estaba monopolizada por tareas manuales y tediosas.

Entre ellas, a ver si te suena alguna: generar informes financieros a partir de hojas de Excel infinitas, conciliaciones bancarias, revisión de las notas de gastos, reembolso de gastos de viaje… ¿seguimos? 

Hoy, afortunadamente, la IA financiera y la automatización de procesos han cambiado las reglas del juego.

La estadística, otra vez a la palestra para reforzar esa afirmación: según el estudio, 7 de cada 10 empresas creen que la IA libera a los equipos financieros de esas tareas repetitivas y aburridas

El objetivo es claro; como decíamos antes, la tecnología permite al CFO dedicar ese tiempo a otras actividades más estratégicas, las que realmente marcan la diferencia.

¿Qué tareas en particular se pueden delegar en la tecnología?

Fruto de ello, lo dicho: hay más tiempo.

Pero ojo, que luego hay que saber utilizarlo. 

Si no se invierte adecuadamente, como en el desarrollo de nuevas habilidades financieras de un corte más humano —menos técnico—, los líderes financieros estarían desaprovechando una oportunidad de oro.

Inteligencia emocional, empatía, capacidad de comunicar decisiones complicadas, gestión de equipos… son habilidades que o se tienen, o hay que adquirir con el tiempo que regala la automatización.

Menos hojas de cálculo y más soft skills, va.

Soft skills: las habilidades financieras clave para el CFO del futuro

¿Qué habilidades financieras tendría que desarrollar todo CFO con el tiempo que otorga la tecnología?

Las humanas, también conocidas como soft skills

Y entre esas soft skills o habilidades blandas, ¿qué nos encontramos?

Aquí van algunas ideas.

Comunicación efectiva: traducir números en historias claras

Un CFO domina las cifras como nadie, pero si no sabe comunicarlas, su impacto se diluye enormemente.

Y es que hablar del EBITDA o de cualquier otro KPI financiero sin más es verbalizar datos en voz alta y ya está.

¿Qué aportaría ese dato a alguien del equipo de compras? 

¿Y a un inversor? 

¿Y a un directivo? 

El CFO tiene que ser capaz de transformar los datos en información clara y digerible, adaptada a las diferentes audiencias a quien se los tenga que comunicar.

Martin Cerullo, nuestro CPO, lo deja clarinete:

«La mitad del trabajo de una estrategia financiera exitosa consiste en saber comunicarlo».

¿La clave? 

Saber traducir esos números en mensajes que calen. Historias fáciles de entender, memorables y sobre todo, útiles para tomar decisiones.

Liderazgo y gestión del cambio: guiando al equipo hacia el futuro

Adaptarse a la tecnología no es solo implementar herramientas; qué va. Es liderar a tu equipo financiero a adoptar nuevas formas de trabajar.

A cambiar la mentalidad.

Por eso, el CFO ya no solo necesita ser un as gestionando números, que también. Ahora también ha de ser un superclase en la gestión de los miembros del equipo, con sus situaciones personales, emociones y limitaciones.

El CFO tiene que contar con las habilidades financieras suficientes para motivar, inspirar y dar contexto. 

Y sobre todo, debe ser capaz de gestionar el cambio de paradigma de forma empática

Porque los cambios no son fáciles y a cada persona le sentarán de una manera; adoptar un nuevo software para empresas, cambiar la dinámica de trabajo, reordenar las prioridades… hace falta un líder para que todo el equipo lo consiga.

Un líder que no solo señale la línea de meta, sino que acompañe a su equipo de forma empática durante todo el camino.

Pensamiento estratégico: números que guían hacia la toma de decisiones

Lo del pensamiento estratégico no es algo nuevo. Ya existía hace muchos años, pero no estaba del todo claro en quién recaía esa responsabilidad.

¿En el CEO?

¿En el CFO?

Y como todos andaban liadísimos con sus quehaceres primarios —recuerda, no había tanta automatización como ahora—, quedaba menos tiempo para pensar en la estrategia 😔

Pero hoy, ese papel lo tiene asignado el CFO. Un líder financiero que no solo tiene que reunir datos y analizarlos, sino saber leerlos, extraer conclusiones y tomar decisiones informadas que marquen el rumbo estratégico de la empresa.

Que sirvan para detectar y aprovechar las oportunidades que presente el mercado.

Que ayuden a detectar y mitigar riesgos financieros que pongan en peligro la salud del negocio.

Un CFO moderno y estratégico no vive atrapado en los números: los entiende, los procesa y los convierte en acciones claras, medibles y relevantes para toda la empresa.

Colaboración interdepartamental: romper silos para crecer

Las islas financieras son agua pasada. Los CFOs aislados… nada, eso ya no va así.

El éxito de la empresa depende, ahora más que nunca, de su colaboración interdepartamental.

Porque las decisiones estratégicas se han de tomar basadas en datos, y los datos, gracias a la tecnología, cada vez fluyen desde más lugares.

Ventas, recursos humanos, IT, operaciones… la tecnología facilita que todos los equipos aporten información que puede —y debe— influir en la toma de decisiones financieras y estratégicas.

Los CFOs que dominen el arte de colaborar podrán aprovechar oportunidades escondidas para aquellos que trabajan en silos.

Y lo que es más importante: obtendrán una visión financiera realmente alineada con la estrategia global del negocio.

Adaptabilidad y resiliencia: navegar en tiempos turbulentos

¿Qué marca el contexto socioeconómico de los últimos años?

Pandemia, conflictos internacionales, cambios políticos bruscos… que acaban derivando en lo de siempre: incertidumbre.

Mercados inestables por un lado, pero inevitables por otro. Y el CFO debe aprender a sentirse cómodo en los entornos así.

¿De repente el mercado da un vuelco por una catástrofe natural? El CFO ha de poder tomar decisiones de forma ágil.

¿La inflación alcanza un nuevo máximo, alterando la economía tanto de las empresas como de los consumidores finales? El CFO ha de ser resiliente y aguantar.

Sí, las empresas necesitan líderes financieros capaces de moverse como pez en el agua en mitad del caos. 

Que no les tiemble el pulso ante la presión, que mantengan la calma y sepan transmitir seguridad a sus equipos, incluso cuando el contexto sea complicado.

Adaptabilidad y resiliencia son, más que habilidades financieras, auténticas herramientas de supervivencia del negocio.

Cómo desarrollar las nuevas habilidades financieras

Ya hemos visto ejemplos de habilidades financieras que necesitará el CFO del futuro, pero… ¿cómo potenciarlas?

La respuesta se resume en estos tres conceptos: formación continua, tecnología bien aplicada y cultura interna colaborativa.

La formación continua es sencillamente imprescindible. 

Según el estudio, las habilidades más importantes serán el dominio de la IA en contabilidad y finanzas, así como el trabajo colaborativo.

Pero cuidado, que además de tecnología, el CFO también necesita formarse en liderazgo, comunicación interna y gestión del cambio, ejemplos de habilidades blandas que veíamos antes.

Porque entender la IA es genial, pero saber explicar las decisiones financieras complejas o liderar tu equipo ante situaciones difíciles es lo que marca realmente la diferencia.

La tecnología también es importante, siempre que la utilices de forma inteligente. 

Menos tiempo en crear reportings financieros te lleva a contar con más horas para aprender a hacer análisis predictivos o llevar el control financiero en tiempo real, algo factible con la tecnología financiera actual.

Es decir, que los conocimientos técnicos tampoco debes dejarlos atrás; la tecnología evoluciona y cada vez es capaz de llegar un poquito más lejos. Es tu deber como CFO estar a la altura.

Y por último, fundamental: la cultura colaborativa.

El futuro pasa por equipos híbridos que mezclan habilidades técnicas y humanas, un fiel reflejo de tu perfil como líder financiero.

Hacen falta CFOs y equipos financieros que trabajen codo con codo con recursos humanos, IT o ventas. 

Que entiendan que las mejores decisiones se toman en equipo, no en silos.

Tu reto como CFO está claro: fomentar una colaboración real, con dinámicas internas que faciliten compartir información y la toma decisiones informadas.

Al final, las finanzas del mañana ya no serán solo números aislados. Serán personas que colaboran, aprenden continuamente y usan la tecnología para alcanzar todos los objetivos de la empresa.

Y para eso, nada como una herramienta colaborativa que te solucione uno de los mayores retos históricos de los líderes financieros: la gestión de gastos ☠️

Pleo, presente y futuro de CFOs y líderes financieros

La transformación hacia un liderazgo estratégico, colaborativo y tecnológico ya está en marcha.

En el camino, en cambio, se atisba un pequeño obstáculo que… si no se gestiona bien, puede volverse enorme y convertirse en un auténtico freno o dolor de cabeza.

Estamos hablando de la gestión de gastos. Todo lo que no sea hacerla de forma eficiente, transparente y colaborativa, irá en contra de las habilidades financieras de las que hemos ido hablando.

Y ahí entra Pleo, la herramienta perfecta para quitarte la parte más fea de la gestión de gastos de encima.

¿Tiempo invertido? Mínimo, porque la solución se basa en tarjetas de empresa y un sistema de control que registra cada gasto de forma automática.

¿Visibilidad y transparencia financiera? Total, porque cada uno de los gastos se registra en tiempo real y queda accesible para todo el que tenga acceso.

¿Colaboración entre departamentos? Absoluta, porque cada persona subirá sus gastos al hacer el pago con la tarjeta y su responsable podrá aprobarlo o rechazarlo, dando razones para ello. 

Ya no habrá que esperar a final de mes, a la revisión de la hoja de gastos de viaje, por ejemplo.

Además, desde el panel de control se pueden crear informes útiles para cada departamento, que a su vez alimentará el sistema de forma automática con sus propios gastos.

Como CFO, Pleo será el soporte tecnológico que te lleve a tomar decisiones informadas, que facilite la colaboración… y que te regale ese tiempo valiosísimo para la formación en habilidades financieras más relacionadas con tus soft skills

¿Hay trato? El siguiente paso lo tienes en la mejor gestión de gastos habida y por haber.

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